La comarca, incluida dentro del clima mediterráneo presenta como bosques más representativo los de hoja perenne y endurecida: encinares, alcornocales, acebuchares, etc., y a la misma vez existe bosques de eucaliptos y pinos de repoblación que se concentran sobre todo en la Reserva Nacional de Caza de Cíjara, siendo también muy común el matorral bajo.
El quejigo es el árbol mas singular de la comarca, mezcla de roble y encina, llena de colores el otoño. La encina es el más extendido, crece en cualquier tipo de tierra y es resistente a las carencias de lluvia. Florece en abril y mayo y su fruto, la bellota, madura entre los meses de octubre y noviembre, siendo utilizado para la cría del cerdo. El alcornoque es otro árbol importante en nuestra zona. De su tronco se obtiene la corcha. Esta corteza es cortada cada 8 o 12 años.
En el extracto arbustivo nos encontramos con especies como el madroño (Arbutus unedo), jara (Cistus psilosepatus, Cistus ladanifer), torvisco (Daphne gnidium), coscoja (Quercus coccifera), retama (Retama sphaerocarpa)
Existe una gran variedad de herbáceas, formada por varias especies de liliáceas, labiadas, compuestas, papilionáceas, monocotiledóneas, dicotiledóneas etc., entre las que destacan el lirio campestre (iris xphian), azafrán silvestre ( crocus carpetanus, crocus serotinos), rosa de peonia (paeonia broteroi), gamonita (astragalus albus), orégano (origanum virens),